Construido para el estudio geofísico de los terrenos por los métodos de refracción, está fundado en los principios clásicos de este tipo de aparatos, habiéndose no obstante introducido en ellos tan importantes perfeccionamientos que ha sido posible reducir notablemente tanto su peso como su volumen haciéndolos muy transportables y de sencillo manejo.
El sismógrafo consta de un péndulo horizontal montado entre barras de torsión, con palanca cónica de aluminio y transmisión por fricción en cabeza. El espejo dispone de dos mandos de orientación según dos ejes ortogonales y amortiguamiento magnético. La masa del péndulo está dotada de un freno indiferente. El conjunto va protegido por una funda de aluminio con base de bronce.
El registrador preparado para funcionar con papel sensible consta de un mecanismo de arrastre del papel; un dispositivo de control de velocidad integrado por un galvanómetro, y un diapasón de ballesta de 0.1" y un sistema de iluminación; y un mecanismo para observación o regristro de la señal del galvanómetro. El conjunto está montdao en una caja de aluminio en cuyo exterior se encuentran los mandos, estando soportada por un trípode con patas telescópicas.
El sistema sismógrafo-registrador está calculado para trabajar con una separación de 1 m. entre ambas unidades.
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El poder amplificador es aproximadamente 20.000 veces. El periodo propio del sismógrafo es de 50 H, regulable. La velocidad del papel puede variar entre 1 y 20 centímetros por segundo.
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Información extraída del documento “Informe de la labor realizada por el Instituto “L. Torres Quevedo” de instrumental científico durante el segundo trimestre del año 1947", páginas 7 y 8.
Laboratorio de Geofísica
Esta Sección inaugura en España la fabricación de prototipos de común empleo en la Prospección geofísica. La necesidad de trabajar contra pedido firme, ha limitado su actividad a la ejecución de aquellos encargos que le han sido hechos al Instituto por el Instituto Geológico y la Jefatura de Sondeos de obras públicas.
Refiérense estos a dos estaciones emisoras y 12 receptores para los procedimientos sísmicos por los métodos de refracción; encargo del Instituto Geológico y Minero de España, y a un potenciómetro para medidas de resistividades por métodos de corriente continua, encargo de la Jefatura de Sondeos de O.P.
El aparato sísmico, consiste en sismógrafo, estación receptora de T.S.H. y registrador. De ellos se han realizado los prototipos, y en la actualidad y durante los tres últimos meses se han hecho las modificaciones que aconsejaba la experiencia realizadas con el prototipo.
El equipo que presenta el Instituto, tiene varias innovaciones con relación a sus equivalentes extranjeros. Son de destacar la simple disposición de frenado. El galvanómetro de una sensibilidad mucho mayor; la suspensión del péndulo por barras de torsión que facilita notablemente el amortiguamiento y permite modificar el periodo propio del péndulo. El sistema magnético de transmisión es más elástico que los que tienen los equipos extranjeros, y representan una gran economía de tiempo en la puesta a punto del aparato. Las pequeñas dimensiones del galvanómetro permiten colocarlo dentro del registrador ahorrándose un trípode en el conjunto.
El peso de un equipo embalado pesa aproximadamente 17 kg. Su equivalente de la casa Askania de Berlín pesa 110 kg. Con esto la economía que representa en personal y caballerías para su manipulación en el campo es muy considerable.
Respecto al equipo eléctrico, se han hecho estos meses prácticas de campo con él, y se ha proyectado y realizado el equipo complementario, consistente en piquetas antipolarizables, carretes para cable y caja especial de embalaje.
Se ha preparado un trabajo teórico sobre su empleo en hidrología y tectónica.
El laboratorio tiene en estudio para el Instituto Geológico un galvanómetro electrónico para medir resistividades de rocas por medio de corriente continua y alterna.