Se contempla el caso paradigmático de un sistema sensorial complejo que trata de imitar al sistema olfativo humano, Teniendo presente que el sentido olfatorio natural presenta todavía importantes lagunas en la interpretación de su funcionamiento, así, este trabajo intenta una aproximación primaria a las formas operativas más aceptadas de este sentido, de forma que mediante la conjunción de una parte sensorial y otra de inteligencia, podamos configurar un aroma. Es un hecho incontestable la ventaja que puede suponer para distintos ámbitos de la vida el disponer de sistemas moderadamente sencillos, y muy objetivos capaces de identificar y cuantificar la presencia de aromas. Se presentan algunas aplicaciones de la industria alimentaria, medioambiental y de procesos así como su potencialidad para los ámbitos de la medicina o de seguridad.
J. Gutiérrez, M.C. Horrillo, I. Sayago, L. Arés, M.J. Fernández, R. Gómez-Espinosa
Equipos y tecnología, Ene/Feb 2000, pp. 175-178. ISSN: 0212-1689. Madrid